Receta para hacer patacones caseros
Los patacones caseros son uno de los aperitivos colombianos más tradicionales que puedes conocer. Es casi imposible estar un tiempo en Colombia y no haber probado alguno. De por sí el plátano es un ingrediente típico de la gastronomía de ese país, y si hablamos de esta forma de hacerlo, más aún. ¡Es una delicia! y sirven para acompañar otros platos tradicionales, especialmente en las regiones costeras.
Cómo preparar patacones en casa y fáciles
Preparar patacones en casa es sumamente fácil, no te preocupes si nunca los has cocinado. Lo único que debes hacer es seguir todas nuestras instrucciones, y pronto comenzar a disfrutar de este aperitivo tan tradicional. Una de las ventajas es que son muy económicos, y si te encuentras entre el sur y el centro de América, encontrar plátano será fácil. ¡Así que vamos a cocinar!
Patacones
Utensilios
- Cuchillo
- Sartén para freir
- Espátula para escurrir
- Papel plástico
Ingredientes
- 2 plátanos verdes
- Aceite vegetal
- Sal al gusto
Elaboración paso a paso
- Paso 1: Tomamos cada plátano verde, le quitamos la cáscara y los cortamos en 4 partes iguales. Con cada una de ellas se crearán 4 patacones grandes.
- Paso 2: Tomar una sartén y calentarla con suficiente aceite a fuego medio-alto. Después agregar los plátanos cortados y freír por algunos minutos. Solo para que se doren un poco por fuera; ya que por dentro aún están crudos y suaves.
- Paso 3: Sacarlos, ponerlos sobre un papel absorbente y al cabo de 3 o 4 minutos, ponerlos sobre un papel plástico. Con la ayuda de un plato se comienzan a aplastar. Deben quedar planos, pero no tanto como para romperse.
- Paso 4: Hacer el proceso con los otros pedazos grandes de plátano.
- Paso 5: Una vez que tengas aplastado los plátanos, se sumergen en un bol con una cucharada de sal, esperar 5 minutos y sacarlos tratando de escurrir un poco el agua.
- Paso 6: Volver a la sartén con aceite, esta vez vamos a freír por completo los patacones. Echar una a una las piezas y dar vuelta hasta que queden dorados y bien crujientes. Por último, volver a pasar por papel absorbente antes de servir