Paso 1: Para comenzar debemos macerar un poco las chuletas. Procedemos a meterla dentro de una bolsa de plástico hermética (con cierre) y allí añadimos una cucharadita de mostaza, comino en polvo al gusto, ajo bien machacado, sal y pimienta. Después llevarla al refrigerador por mínimo 1 hora, pero si está la posibilidad de dejarlas por la noche, es mejor.
Paso 2: Tomar una sartén, echar un poquito de aceite y ponerla a fuego medio. Sacamos nuestras chuletas, las echamos y cocinamos de lado y lado por 3 minutos. Después sacar y reservar.
Paso 3: En la misma sartén, echar las cebollas de cabeza, los tomates picados en cuadros y ajo machacado. Cocinar a fuego medio por 8 minutos aproximadamente, y agregar solo un poco de aceite si es necesario. Después agregar las chuletas que tenemos reservadas; las vamos a seguir cocinando por 15 minutos más, todo a fuego medio.
Paso 4: Sacar las chuletas, servir con cilantro fresco finamente picado y toda la salsa que ha quedado en la sartén.