Paso 1: Tomamos cada plátano verde, le quitamos la cáscara y los cortamos en 4 partes iguales. Con cada una de ellas se crearán 4 patacones grandes.
Paso 2: Tomar una sartén y calentarla con suficiente aceite a fuego medio-alto. Después agregar los plátanos cortados y freír por algunos minutos. Solo para que se doren un poco por fuera; ya que por dentro aún están crudos y suaves.
Paso 3: Sacarlos, ponerlos sobre un papel absorbente y al cabo de 3 o 4 minutos, ponerlos sobre un papel plástico. Con la ayuda de un plato se comienzan a aplastar. Deben quedar planos, pero no tanto como para romperse.
Paso 4: Hacer el proceso con los otros pedazos grandes de plátano.
Paso 5: Una vez que tengas aplastado los plátanos, se sumergen en un bol con una cucharada de sal, esperar 5 minutos y sacarlos tratando de escurrir un poco el agua.
Paso 6: Volver a la sartén con aceite, esta vez vamos a freír por completo los patacones. Echar una a una las piezas y dar vuelta hasta que queden dorados y bien crujientes. Por último, volver a pasar por papel absorbente antes de servir